Gratamente para la ciudad, según estadísticas recientemente publicadas por el DANE, la tasa de desempleo se ubicó en 9,7% para el trimestre móvil mayo – julio 2015, mostrando una reducción de 0,6 puntos porcentuales con respecto al trimestre (abril – junio) y 0,7 puntos con respecto al mismo trimestre del año pasado. Con ésta cifra el número de ocupados se eleva a 196 mil y el número de desocupados baja a 21 mil en Manizales y Villamaría.
Ahora bien, la dinámica del empleo en la ciudad y, en general en cualquier territorio, responde al comportamiento de la economía, las expectativas y demandas de los empresarios y la gestión del gobierno local en busca de generar las condiciones más eficientes para la generación de empleo.
La problemática del empleo es muy diversa y compleja, varía según la situación y perspectiva de donde se analice y de la región que sea objeto de diagnóstico. El análisis no se enfoca exclusivamente a la generación bruta de empleo, sino que se extiende a la calidad del mismo y segmentado a diversos sectores productivos y grupos sociales. Desde esta perspectiva una política de empleo es transversal al sistema económico y apunta a objetivos estratégicos cómo son la reducción de la pobreza, la desigualdad económica y el desarrollo económico, desde una concepción multidisciplinaria.
La formulación de una política de empleo debe ser entendida por la ciudad y el departamento como un modelo de crecimiento hacia adentro y sostenido, basado en un análisis previo de la situación del mercado laboral local y la articulación de diferentes líneas de acción y actores en el sistema con el fin último de generar empleo en cantidad y calidad. La política de empleo deberá responder a la dinámica de la oferta y la demanda de trabajo, integrar políticas sectoriales, establecer mecanismos de inclusión colectiva, intervenir en los niveles micro y macroeconómicos y promover a nivel interinstitucional su aplicación.
En el actual contexto electoral se invita a los candidatos a la Alcaldía de Manizales y la Gobernación de Caldas, a pensar en una Política Regional de Empleo que logre una coordinación y articulación entre los diversos entes del territorio y tenga como objetivo ofrecer condiciones favorables para que en la ciudad y el departamento se faciliten las oportunidades que logren absorber la población económicamente activa en condiciones de formalidad, estabilidad y salarios coherentes con la capacidad técnica y humana de las personas.
Claramente es un proceso que demanda el esfuerzo de tiempo y recursos considerables por parte de las autoridades pero los efectos de su implementación son de gran impacto en todo el sistema económico. Y quizás lo más importante de la definición de una política de empleo es la articulación con el resto de políticas hacia un mismo fin: creación de empleo de calidad y crecimiento económico sostenido.
Una política laboral bien definida es una apuesta por un modelo de desarrollo en la región basado en la calidad de vida y el beneficio de la población.
Referente a ésta temática se encuentra un documento titulado Guía para la formulación de políticas nacionales de empleo, el cual fue publicado por la Oficina Internacional del Trabajo (OIT) en el año 2012 que valida la hipótesis de una necesidad de tener una política de empleo. El documento se puede consultar aquí. ÁREA DE INVESTIGACIONES SOCIOECONÓMICAS
CÁMARA DE COMERCIO DE MANIZALES POR CALDAS