Nota Económica N°6 
viernes, 20 de febrero de 2015

Mercado Laboral en Colombia: Estructura y Desafíos

La semana pasada el DANE publicó cinco informes especiales relativos al mercado laboral en Colombia referentes al periodo enero – diciembre de 2014, mostrando en diversas cifras la estructura laboral del país.
 
Colombia es un país con una población total aproximada de 46 millones 392 mil habitantes, 51% representado por mujeres y un 49% por hombres. De la población total, el 79,6% es población en edad a trabajar – PET (37 millones 21 mil personas) y el 65% de dicho grupo representa población económicamente activa – PEA (24 millones 234 mil personas). De la población económicamente activa – PEA un total de 22 millones 272 mil personas se encuentran ocupadas para el último trimestre de 2014 y el restante un millón 961 mil personas se encuentran desocupadas, 57% mujeres y 43% hombres.
 
El 43% de los ocupados en el país son trabajadores por cuenta propia (9 millones 468 mil personas), 38% son empleados particulares (8 millones 469 mil personas), 5% son trabajadores familiares sin remuneración (un millones 202 mil personas), 3,9% son empleadores (871 mil personas), 3,8% son empleados del gobierno (850 mil personas), 3,3% empleados domésticos (732 mil personas) y 3% son jornaleros (657 mil personas).  
 
Desagregado por ramas de actividad, el 27% de los ocupados a nivel nacional se encuentran en el sector comercio, hoteles y restaurantes (6 millones 63 mil personas), 19% en actividades de servicios sociales, comunales y personales (4 millones 295 mil personas), 16% en agricultura (3 millones 647 mil personas), 12% en industria manufacturera (2 millones 747 mil personas), 8% en actividades de transporte y comunicaciones (un millón 856 mil personas), 7% actividades inmobiliarias (un millón 654 mil personas) y 6% en el sector de la construcción (un millón 445 mil personas). Al analizar la estructura laboral por género  se evidencia que la mayor proporción de hombres están ocupados en la agricultura (23%), comercio, hoteles y restaurantes (22%), transporte y comunicaciones (11,8%) e industria manufacturera (11,5%); en cambio en las mujeres se ocupan en mayor proporción en el sector comercio, hoteles y restaurantes (34%), servicios comunales, sociales y personales (31%) e industria manufacturera (14%).
 
Para un total de 23 ciudades principales a nivel nacional, con un total de ocupados de 11 millones 960 mil personas, se muestra una tasa de informalidad laboral del 49%, con una tasa de informalidad laboral más elevada para las mujeres (53%) sobre la tasa respectiva para los hombres (47%). Los ocupados informales del país se concentran en su mayor parte en el sector comercio, hoteles y restaurantes, con el 42% y son principalmente de categoría cuenta propia, con una proporción de 63%.
 
Finalmente las estadísticas reveladas por el DANE dieron a conocer los principales indicadores del mercado laboral en los jóvenes, donde la población en edad a trabajar – PET de 14 a 28 años es igual a 12 millones 68 mil personas a nivel nacional, de la cual, el 60% representan a la población económicamente activa – PEA (7 millones 267 mil jóvenes) y el 40% población económicamente inactiva (4 millones 801 mil jóvenes).
 
De la población económicamente activa – PEA juvenil, un total de 6 millones 228 mil son jóvenes ocupados y un millón 39 mil son jóvenes desocupados, así, Colombia tiene una tasa de desempleo juvenil para el último trimestre de 2014 del 14,3% (10,1% para hombres y 19,1% para mujeres). Los jóvenes ocupados de Colombia son, en su gran mayoría, empleados particulares (51%) y cuenta propia (31%) y se concentran el sector comercio, hoteles y restaurantes (30%), servicios comunales, sociales y personales (17%), agricultura (15%) e industria manufacturera (13%). De la población ocupada joven, el 65% cuentan con contrato, de los cuales, el 54% es tipo de contrato escrito y 46% contrato verbal.  
 
Las cifras hablan por sí solas. En los últimos años la proporción de población ocupada informal en el país no ha logrado reducirse significativamente y se encuentra actualmente en niveles alarmantes (Bogotá, Medellín y Manizales poseen las menores tasas de informalidad laboral del país, cercanas al 43%). El desempleo juvenil, que ha logrado reducirse en más de 3 puntos porcentuales en los últimos ocho años, todavía está en niveles sensiblemente altos, con cierta ventaja para los hombres. Y en cuanto a la población económicamente inactiva – PEI, que ha disminuido considerablemente en seis años, se presenta una mayor proporción de inactivos en las mujeres y mientras el 58% de los hombres inactivos para el último trimestre de 2014 se encontraban estudiando, el 57% de mujeres inactivas estaba dedicado a oficios del hogar.
 
Los indicadores laborales en general son ligeramente más inquietantes para las mujeres y la estructura laboral del país “cojea” en el desempleo juvenil y la informalidad laboral. El desafío actual del gobierno nacional y las administraciones locales es sin duda colocar en marcha maniobras de política y planeación económica que: 1) logren reducir la brecha laboral entre hombres y mujeres; 2) reduzcan el desempleo juvenil a un solo digito; y 3) transformar la oferta laboral en el mediano y largo plazo mayoritariamente formal (por encima del 75%). Para que estas metas se cumplan es necesario, como medida transversal en el sistema, desarrollar estrategias de política económica sectoriales con las diversas instituciones de las regiones, que incentiven y fortalezcan sectores económicos intensivos en capital humano como son la agricultura, la industria y el comercio.