“Esta idea se nos ocurrió a un socio, John Jairo González, y a mí en una tarde de negocios mientras contemplábamos la posibilidad de traer un concepto nuevo e innovador alrededor de un café para Manizales”; así contó el empresario manizaleño Juan Carlos Botero de cómo un avión DC9 de la desaparecida aerolínea Intercontinental terminó en un lote del Cerro de Oro en Manizales. 
Según el empresario inicialmente se pensó en el tren de la Universidad Autónoma y potenciarlo como marca, pero en el proceso de construcción de ideas se decidió hacer en la ciudad algo atípico, tomando como base el barco tipo bar que hay en Cartagena; así fue como llegaron a decir: ¿por qué no puede existir en Manizales un avión?
Mientras el proyecto se ponía en marcha, muchas empresas y personas sugerían que la idea de negocio era más viable en ciudades grandes como Bogotá o Medellín, pero estos dos empresarios manizaleños quisieron apostarle a su región. “Sabemos que en Manizales y en Caldas hay un gran potencial turístico y puede llegar a ser más alto de lo que pueden tener otras ciudades grandes. Simplemente no vimos una mejor opción que nuestra ciudad”, argumentó Botero. 
El DC9 que compraron John Jairo y Juan Carlos estuvo cerca de dos años en el aeropuerto ElDorado de Bogotá y se obtuvo por medio de una subasta por un valor de 400 millones de pesos, sin contar la adecuación.
La llegada a Manizales
Inicialmente se pensó traer el avión a la ciudad en helicóptero, pero no se pudo debido al peso. Por eso debieron desarmarlo en cuatro grandes partes, le quitaron las alas, la cola y traer el avión por tierra en carros tipo camabaja. “Los camiones se demoraron ocho días en la vía. Además el proceso de desarme en Bogotá duró un mes y luego otro mes armándolo acá en Manizales”, afirmó Botero. 
El nombre fue todo un desafío, pues debía ser sonoro, de recordación y descriptivo “El nombre no fue fácil encontrarlo, y dentro de la diversidad de propuestas escogimos que fuera Mayday ya que la palabra traduce “auxilio” y auxilio era lo que estaba pidiendo Manizales basado en un proyecto innovador y aquí está”.
El proyecto está en proceso de materialización en el Cerro de Oro. “El sector que estaba muy desperdiciado y no existía un mirador en el que la sociedad tuviera la oportunidad de contemplar el paisaje que ofrece la ciudad”, dijo Botero. 
A pesar de que el bar aún no está en funcionamiento y se espera que se pueda inaugurar en poco más de tres meses, personas que han visto el proyecto ya le propusieron a los empresarios llevarse el modelo para ciudades como Medellín e incluso Panamá. “La idea es registrar Mayday y poderlo llevar a varias partes del país y del mundo, pero siendo pioneros en Manizales, que se reconozca que la idea nació aquí y de aquí se copió”, expresó Juan Carlos Botero.

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